Vi un gran trono blanco, y al que estaba sentado en él, de
delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se halló ya para
ellos. Y vi los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios. Los libros fueron
abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida. Y fueron
juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus
obras. El mar entregó los muertos que había en él, y la muerte y el Hades
entregaron los muertos que había en ellos, y fueron juzgados cada uno según sus
obras. La muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte
segunda. El que no se halló inscrito en el libro de la vida, fue lanzado al lago
de fuego. Apocalipsis 20:11-15
INTRODUCCIÓN
Hace 12 años grabé un estudio titulado “El Juicio Final”. A pesar de ser el
DVD más viejo en toda mi colección de estudios, continúa siendo el número uno en
ser solicitado, y es el número uno de nuestros estudios, pues se siguen
convirtiendo almas en los hogares.
He intentado re-grabar este estudio en más de una ocasión, para actualizar
las imágenes, pero ha sido imposible, porque sé que si lo hago, no tendría la
inspiración con que salió originalmente.
Sin lugar a dudas, el tema de la eternidad es algo que le llama la atención a
todo ser humano; sobre todo entre aquellos seres humanos cuya conciencia todavía
no ha sido entenebrecida (es decir, endurecida), pues existen seres humanos que
en vida ya están muertos. Es decir, ya no sienten la más mínima sensibilidad por
el futuro eternal de su alma.
ENDURECIMIENTO DEL ALMA
Bienaventurado el hombre que siempre teme a Dios, pero el que
endurece su corazón caerá en el mal. Proverbios 28:14
En realidad existen personas que no tienen la más mínima punzada en su
corazón en relación a la eternidad; en otras palabras, personas que no les
importa en absoluto el saber que se irán a una condenación eterna.

Cuando el corazón de una persona esta
endurecido rechazan
cualquier idea relacionada con la vida eterna.
Y también vale pena preguntarse si existen personas que aun en el mismo lecho
de muerte se niegan recibir a Cristo Jesús. Por supuesto que sí existen, las
hay.
Yo recuerdo que cuando era un niño, mi padre, quien ya está con el Señor,
tenía un amigo; nunca lo olvido, pues era muy especial con la familia. Pero él
era una persona muy blasfema contra Dios. En los últimos días de vida, mi padre
estuvo presente en su lecho de muerte. Mi padre me llevó, y nunca en mi vida he
podido olvidar ese acontecimiento; yo tenía unos ocho años, entonces.
Mi padre le preguntó: “¿Rodimiro, quieres pedirle perdón al Señor antes de
morir? ¿Quieres que llame a un líder religioso para que te ayude a irte en paz
con el Señor?”.
Fue impresionante su repuesta, pues meneando su cabeza dijo: “No quiero;
quiero morir así”. Y en ese momento pasó a la eternidad.
PAÍSES ORIENTALES
Posiblemente usted, lector, también tiene testimonio de familiares o amigos
que han muerto en las mismas circunstancias; hay certeza de que en los países
donde satán tiene total control de esos países, las almas están muy endurecidas.
Está el caso de los países orientales, en especial China y Japón, donde el
espíritu de suicidio es una tradición. Pero no olvidemos que en estos países
adoran abiertamente al dragón; es decir, al mismo diablo.
PAÍSES MUSULMANES
En los países musulmanes también domina el espíritu de endurecimiento del
alma. Pero no olvidemos que la religión musulmana adora a un dios llamado Alá, y
que según la leyenda, es un dios pagano también llamado “El dios de la muerte y
el suicidio”.
No olvidemos que los musulmanes odian al Dios de la Biblia, lo que de
inmediato nos hace sospechar que ellos adoran al mismo diablo disfrazado de un
dios.
¿Y EN ESPAÑA?
España sin lugar a dudas es el número uno en todo Europa en tener un corazón
entenebrecido contra Dios, en especial sobre el nombre de Jesús. He hablado con
muchos españoles, verdaderamente cristianos, y todos ellos me han confirmado una
de las más grandes evidencias, de que en este país está una deidad demoniaca de
las más altas esferas de satán, pues es horripilante cómo la gente inconversa de
este país blasfema del Señor, y mueren sin sentir el más mínimo deseo de pedir
perdón al Señor.
"Madrid es la única capital del mundo que tiene
una fuente con la imagen del diablo.
La Fuente del Ángel Caído está situada
en los Jardines del Buen Retiro." (1)
Este es el único país donde la mayoría de los españoles evangélicos no ven
frutos de conversión de sus propios parientes cercanos; así sucede en nuestro
continente americano. En definitiva esta es una cualidad de la
Bestia-Anticristo.
¿PUEDE UN CRISTIANO ENDURECERSE?
Es muy importante que esto lo sepamos los cristianos. La Palabra del Señor
enseña que si una persona blasfema del Espíritu Santo puede ser endurecida; esa
blasfemia puede venir en negar públicamente la inspiración de Las Sagradas
Escrituras, o caer en la apostasía.
Esto último es lo que se considera fuertemente como una blasfemia, pues
después de haber conocido la verdad, siguen a la mentira y se empapan del
espíritu del anticristo. Es muy importante que analicen
II Tesalonicenses 2:10-12, donde Pablo dice que el Señor les
envía un espíritu de mentira a todos los que no quisieron permanecer en la
verdad, a fin de que sean todos condenados.
UN TESTIMONIO
Hace unos 11 años tuve una experiencia con un pastor aquí en el valle de Río
Grande, Texas, respecto a su familia. No mencionaré el nombre de este pastor que
ya está muerto. Este pastor había sido un buen hombre de Dios, hasta que en su
corazón entró la apostasía.
Él tenía su propio canal de televisión. Un día él me llevó a su televisora, y
hablé fuertemente de la venida del Señor; sin embargo, él se burló, y me hizo
una trampa en su televisora. Me hizo una entrevista, y de inmediato la
distorsionó, haciéndome quedar como alguien que no podía defender el tema de la
venida del Señor. Y terminó diciendo que dejara de andar asustando a la gente
con ese tema de la Segunda Venida del Señor, pues que Él no regresaría hasta por
lo menos dentro de 240 años.
Durante esos días yo estaba muy deprimido, por la traición de este pastor.
Pero una noche, en la madrugada, el Señor me dio una visión. En ella miré un ser
angelical que me dijo:
“Para él, mí venida está en 240 años, más lo que
él no sabe es que mi venida para él está en siete meses”.
En la mañana siguiente fui a buscar al Pastor Ramón Martínez, un buen siervo
del Señor, de los pocos que quedan en el Valle de Río Grande, Texas, ante la
gran apostasía. Le comenté la visión a Ramón, y él me dijo:
“Cuente el
día de la entrevista que este pastor le hizo, y cuente a partir de esa fecha
siete meses”.
La entrevista fue en el mes de febrero; los siete meses caían en el mes de
agosto, y el día caía en un sábado.
Exactamente a los siete meses, a las cuatro de la tarde, hora exacta en que
me había hecho la entrevista, este pastor murió de un ataque al corazón. Por
razones que ustedes entenderán, no daré más detalles de su muerte; sólo les diré
que murió en su templo, en una forma vergonzosa.
Esto quiere decir que un cristiano sí puede llegar a ser entenebrecido; por
eso es importante que permanezcamos en la sana doctrina, y sobre todas las
cosas, que amemos al Señor en lo más profundo de nuestro corazón, pues el sabio
Salomón nos enseñó que el principio de toda sabiduría es el temor al Señor.
VIDA DESPUÉS DE LA MUERTE
En mi estudio en DVD, sobre “El Juicio final”, menciono que la muerte no es
el fin de una persona, sino el inicio de la verdadera eternidad.
Si murió con Cristo, en el momento de su muerte esa persona es recibida por
seres angelicales y llevado a las moradas celestiales, y si murió sin Cristo,
seres horripilantes vienen por su alma para llevarla a un lugar donde el gusano
nuca muere y el fuego nunca se apaga; ese lugar, es conocido como El
Infierno.
Recientemente, History Channel dio un documental sobre el infierno, y me
quedé impresionado cómo estos científicos terminan diciendo que existen
suficientes evidencia de la existencia de este lugar.
Sin embargo, menciono que el infierno no es el destino final de las almas que
en estos momentos se encuentran en ese lugar tenebroso; ese lugar es sólo una
cárcel donde esperan los condenados la sentencia final, que se conoce como El
Juicio Final. En otras palabras, a pesar de estar ahora mismo en ese lugar,
todavía no han escuchado su sentencia final por la cual fueron a ese sitio.
Existen algunas sectas, como la de Los Testigos de Jehová y Los Adventistas
del Sétimo Día. Estas sectas, y otras afines de ellas, niegan la existencia del
infierno; sin embargo, sus enseñanzas carecen de respaldo de Las Sagradas
Escrituras. Pero también carecen de certeza de convicción del alma, pues cada
alma viviente sabe que existe vida después de la muerte. Y sobre eso me estaré
refiriendo más adelante.
No cabe duda que lo mejor es tener al Señor Jesús en nuestros corazones, ya
que es la única alternativa que poseemos para poder escapar de las llamas del
infierno; no importa lo que digan los demás, de que eso no existe. Recuerda que
esa gente no puede cambiar la realidad de la Biblia; por lo tanto, no importan
sus opiniones, sino la de La Escritura.
Recuerde: Sus amigos, o los que no creen en la eternidad, no podrán ayudarle
un minuto después de su muerte. De modo que no pierdes nada en confiar en el
Señor.
Déjenme compartirles la siguiente historia: En la década de los 80´s, que fue
la última edad de oro del Cristianismo puro, llegó a Costa Rica un predicador
muy famoso de los Estados Unidos. Este predicador tuvo el privilegio de hablar a
todo el gabinete del entonces Presidente Oscar Arias Sánchez.
El predicador les comentó que él viajaba mucho ministrando La Palabra del
Señor, y que tenía más de 800 programas radiales y televisivos en el mundo, y
que lo que más le dolía a él era tener que dejar a la familia por mucho tiempo,
y que algunas veces no tuvo tiempo de estar presente en acontecimientos
importantes, como el nacimiento de su primer nieto.
Uno de los miembros del gabinete le hizo la siguiente pregunta: “Usted nos ha
compartido el sacrificio profundo que ha tenido que hacer en el ministerio del
Señor. ¿Qué pasaría si al morir usted, todo lo que se ha sacrificado por el
Señor resulta no ser nada cierto?”. El predicador respondió: “Si al morir,
resulta que todo lo que he predicado de la vida eterna resulta ser mentira, no
me preocupo, pues no habré perdido nada, puesto que soy feliz con lo que hago.
Pero quiero hacerle la misma pregunta a usted: ¿Qué pasaría si usted al morir
resulta que todo lo que le estoy enseñando de la vida eterna resulta ser una
realidad? El problema es que para ese momento usted ya no tendría tiempo de
arrepentirse; por lo tanto, es mejor que crea ahora que está vivo, pues no
tendrá nada que perder. En cambio, si no cree, todo lo habrá perdido”.
Lo que este predicador le dijo a ese funcionario es una verdad, y el alma
sabe perfectamente bien eso, siempre y cuando esa alma no haya sido endurecida
por causa de blasfemias o cosas horripilante durante su vida cotidiana.
Lo que quiero dejar claro es que una vez que muere la persona, no se ha ido
del todo, pues existen evidencias bíblicas contundentes de que resucitará el día
del Juicio Final, y vendrá en su propio cuerpo, para comparecer delante del
Señor, para escuchar su final sentencia.
El día del juicio final los muertos vendrán
delante de Dios y serán juzgados por las
cosas que estén escritas en los
libros, según sus obras (Ap. 20:11-15). (2)
En el DVD, doy contundentes pruebas de este acontecimiento, prueba
irrefutable en la lectura del inicio de este tema.
LA MUERTE DE LOS CUATRO ENEMIGOS MÁS GRANDES DEL
PUEBLO DE ISRAEL, EN LOS ÚLTIMOS DIEZ AÑOS, HAN SIDO MUERTES HORRIBLES.
A continuación quiero hablarles de los cuatro hombres que en sus vidas
fueron los más grandes enemigos del pueblo judío; estos hombres en sus años de
gobierno financiaron múltiples atentados terroristas contra el pueblo judío. Con
sus financiamientos dejaron a centenares de niños huérfanos, centenares de
mujeres viudas; o viceversa. Miles de estas víctimas judías nunca perdieron la
esperanza de algún día poder ver la justicia divina, aquí en esta vida.
Pero estos cuatro personajes no sólo causaron dolor y luto al pueblo judío,
sino que también lo hicieron con sus propios pueblos; déjenme mencionar a estos
cuatro hombres que en estos momentos se encuentran en lugar eternamente
aterrador, y después haremos un análisis de uno por uno.
Estos hombres son:
Yasser Arafat, Saddam Hussein, Bin Laden y Moamar
Kadafi.
Todos ellos han muerto en menos de 10 años, y si el Presidente Hugo Chávez no
se arrepiente, parece que es el siguiente en la lista. Pero entremos a
analizarlos uno por uno.
YASSER ARAFAT
Este hombre, que fuera el máximo líder palestino, fue considerado como uno de
los más grandes asesinos del pueblo judío; él impulsó y diseñó múltiples
atentados terroristas contra el pueblo judío, en especial en barcos,
restaurantes y buses escolares.
Nunca olvidaré aquella mañana del año de 1996. Yo estaba viviendo en la parte
media de la calle Hiram, en el barrio Mea-Sharim, en Jerusalén. Esa mañana mi
cuarto se estremeció; salí a ver, y estaba en ese momento la escena de dolor.
Era un bus de la Ruta 68, completamente repleto de niños de kínder, quienes,
acompañados de sus abuelitos, iban a la escuela. El atentado fue perpetrado por
los terroristas palestinos, inspirados en Yasser Arafat, quien celebró el
atentado.
Este hombre entró por última vez a la explanada del templo en Jerusalén en
septiembre del 2000, y maldijo públicamente al pueblo de Israel. Y dijo que no
moriría hasta no ver a los judíos lanzados al mar Mediterráneo; sólo cuatro años
después, en el año 2004, Yasser entró en una enfermedad terminal, y sus últimos
días de agonía fueron espantosos. Fue traslado a Francia, para que los médicos
trataran de salvarlo, pero fue en vano.

Yasser Arafat junto a sus médicos antes de ser
trasladado a Paris. (3)
En los noticieros salieron las siguientes declaraciones del médico personal
de Arafat, quien estuvo con él hasta el último momento.
“Fueron sietes días de horrible agonía”, dijo su médico.
“Su propia esposa no soportó estar en esos momentos de agonía, porque
era espantoso”.
Según las palabras de algunas enfermeras, dijeron que nunca habían visto
semejante agonía; los titulares en los periódicos palestinos decían que Arafat
se negaba a morir.
La Palabra del Señor, en
Génesis 12:3, dice, en relación a la descendencia del padre
Abraham:
“Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te
maldijeren maldeciré”.
Arafat murió cuatro años después de haber maldecido públicamente al pueblo de
Israel; líderes judíos dijeron que Arafat había bajado con sus manos
ensangrentadas a la eternidad.
No sabemos qué es lo que miraba Arafat en los ojos de la eternidad en esos
siete días de horrible agonía, pero sí creo que su alma estaba aterrada, porque
una vez paralizado el corazón de él, esa alma pasaba a un lugar eternamente
horripilante. Y posiblemente en estos momentos, en el lugar de tormento puede
ver con horror toda la sangre inocente derramada, incluyendo la de los niños de
esa mañana de 1996.
Sin embargo, Arafat todavía tiene que volver a la Tierra, pero no para tener
otra oportunidad, sino para comparecer ante el impresionante Trono Blanco y ante
El Supremo Juez. Para escuchar su sentencia justa, y ser lanzado al lago de
fuego para siempre jamás.
SADDAM HUSSEIN
Este hombre, quien gobernó por casi tres décadas el país de Irak, donaba 25
mil dólares a las familias palestinas que hicieran atentados terroristas contra
el pueblo de Israel. Por 25 años financió el proyecto para matar a judíos,
aparte que fue uno de los aterradores criminales de su propio pueblo; mató no a
miles, si no a centenares de miles iraquíes, y a por lo menos 700 mil iraníes en
la guerra de Irak contra Irán. Sus hijos se convirtieron en asesinos al igual
que él; ellos mataban a toda persona que les cayera mal en Irak. Nunca hubo un
tribunal de justicia terrenal que lo juzgara.
En la guerra emprendida por Estados Unidos en el 2003 (guerra que nadie
entiende hasta hoy en día, pero que increíblemente estuvo profetizada en Las
Sagradas Escrituras), tengo un estudio que se llama “USA e Irak”, donde muestro
las evidencia bíblicas. En este mensaje, que grabé cuando todavía él no había
sido apresado, estoy demostrado que Saddam sería agarrado como las ratas. Y así
fue apresado por los soldados estadunidenses: En un hueco, como las ratas.
Saddam fue llevado al tribunal de su mismo país. Cuando le dijo el juez que
se pusiera de pie, para escuchar su sentencia, aquel hombre, que en sus días de
poder fue sumamente arrogante, en ese momento le temblaban las manos, mientras
se miraban sus ojos llenos de terror al escuchar que era sentenciado a la pena
de muerte en la horca.

Saddam Hussein fue juzgado y condenado a morir en
la horca en el año 2006.
Cuando miré en la televisión eso, me acordé del tema del juicio final. Qué
terrible será ese día. Sólo me recuerda aquella parte de
Apocalipsis 6:15-17, donde los hombres suplican a los montes
que bloqueen la mirada del que está sentado en el trono, porque su juicio ha
llegado.
Hoy en día Saddam está en el tormento eterno, arrepentido por los centenares
de almas que asesinó cuando estaba en el poder; sin embargo, Hussein todavía
tiene que regresar a la Tierra para comparecer ante El Trono Blanco y escuchar
su sentencia final, y ser lanzado al lago de fuego, donde ya para ese entonces
estará el mismo satanás, el diablo.
BIN LADEN
Bin Laden fue un acérrimo enemigo del pueblo judío; odiaba profundamente al
pueblo de Israel. Fue un asesino de grandes magnitudes, y fue el autor
intelectual del atentado terrorista de Las Torres Gemelas, en Nueva York, y el
Pentágono, en Washington D.C. Sus últimos 10 años los pasó huyendo;
escondiéndose. Debió ser horrible la vida de este hombre en estos años.
No tenemos mucha información de los últimos momentos de su vida, mientras se
enfrentaba a los soldados estadunidenses, pero sí pudimos ver su rostro
desfigurado. Se dice, y son comentarios no oficiales, que él suplicó por su
vida.
Interior de la residencia donde fue realizado el
operativo que terminó con la vida
del líder de Al Qaeda Osama Bin Laden en
Islamabad, Pakistán. (5)
La muerte de este hombre fue celebrada por millones en el mundo, en especial
por los Estados Unidos de América e Israel; por fin, el gran asesino de Las
Torres Gemelas se enfrentó a la justicia divina, y ahora está en las mismas
llamas del Infierno, donde está siendo recriminado por sus propios discípulos
que él entrenó, en especial los 19 jóvenes terroristas que participaron el 11 de
septiembre del 2011, quienes fueron los primeros en verlo llegar al
infierno.
Oh… Qué horrible debe ser para Bin Laden estos momentos; estar enfrentándose
a sus mismos discípulos que están en el infierno, y muchas de las almas que él
mató, y murieron sin Dios y sin fe, y que fueron antes de tiempo al infierno por
culpa de él.
Oh… Qué profundo es este misterio. Vale la pena que estudie profundamente
Isaías 14:9-11.
Como dije, no sabemos cómo fueron los últimos minutos de la muerte de Bin
Laden, pero estamos seguros que fueron horribles y espantosos. Pero sí fue una
profunda vergüenza el fin de sus días, donde ni siquiera pudo tener una
sepultura decente, ya que fue lanzado como un simple animal a las profundidades
del mar. Y de ese mar, un día se levantará el alma de Bin Laden, para comparecer
ante El Gran Trono Blanco, para recibir su juicio final. Y de inmediato será
lanzado al lago de fuego.
MOAMAR KADAFI
Llegó al poder de Libia hace 42 años; todos esos años los gobernó a punta de
sangre inocente. Fue un brutal asesino, al igual que los tres hombres que ya
hemos mencionado.
Kadafi asesinó a miles de miles de su propio pueblo, y sus propios hijos
llevaban el mismo camino; ya eran unos asesinos. Kadafi financió múltiples
atentados contra el pueblo de Israel, y colaboró en los actos terroristas en la
década de los 80´s, contra los dos vuelos de la ya desaparecida línea aérea
Pan-Am.
Moamar Kadafi prácticamente era dueño de su propio país; poseía una
impresionante fortuna, valorada en más de 46 mil millones de dólares. Tenía
impresionantes inversiones en Italia y otros países de Europa; sin embargo, al
morir nada de eso se pudo llevar. Ni siquiera fue enterrado en una tumba digna,
sino en un lugar desconocido del desierto.
¿Cómo fueron los últimos minutos de la vida de este hombre? A Kadafi se le
conocía por ser un hombre sumamente arrogante. Pregunté a un amigo que lo
conocía, de cómo era él en lo personal. El amigo me dijo:
“Lo típico de
todos los dictadores: Tienen una mirada controladora, y a la vez era un hombre
muy soberbio”.
Sin lugar a dudas, la muerte de Kadafi fue horripilante, al igual que las de
Arafat, Saddam y Bin Laden; creo que nadie podrá olvidar, por lo menos en mucho
tiempo, en su propio pueblo, la agonía y desesperación de Kadafi, antes de ser
asesinado y humillado por sus captores.
"Imagen tomada de un video que muestra la captura
de Moammar Kadafi… cubierto en sangre
es empujado a una de las camionetas de
las fuerzas revolucionarias anti-Kadafi…" (6)
Es impresionante escuchar los gritos aterradores que lanzaba Kadafi,
suplicando por su vida; si usted pone atención, son aterradores sus gritos.
Cuando vi ese video en YouTube, me impactó profundamente. Y me vino a la memoria
la película “La Pasión de Cristo”, de Mel Gibson, cuando Judas Iscariote está
aislado, y en esos momentos llegan unos supuestos niños de la calle; esos niños
se le transforman en demonios y comienzan a atormentarlo.
Cuando miraba la pandilla de sus captores, cómo se lanzaban con locura sobre
su cuerpo, me imagino que en esos momentos los rostros de estos captores ante
los ojos de Kadafi estaban transformados en vivos demonios, que en vivo estaban
llegando por su alma. De allí los aterradores gritos de este hombre, que en los
días de su gloria nunca le tembló la mano para mandar cegar vidas.
O nunca se imaginó el dolor profundo que ocasionó en las miles de víctimas;
ahora le tocaba a él, y no hubo fuerza que lo salvara. Así pasó a la eternidad:
En profunda angustia.
Sin embargo, Kadafi todavía tendrá que resucitar para comparecer ante El Gran
Trono Blanco, para escuchar su sentencia final por la cual fue llevado al
infierno, y finalmente al lago de fuego.
CONCLUSIÓN
Vi un gran trono blanco, y al que estaba sentado en él, de
delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se halló ya para
ellos. Y vi los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios. Los libros
fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida. Y
fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros,
según sus obras. El mar entregó los muertos que había en él, y la muerte y el
Hades entregaron los muertos que había en ellos, y fueron juzgados cada uno
según sus obras. La muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es
la muerte segunda. El que no se halló inscrito en el libro de la vida, fue
lanzado al lago de fuego. Apocalipsis 20:11-15
El día del Juicio Final será un acontecimiento sin precedentes en la Historia
humana; será el día en que toda la humanidad, sin Dios, sin fe y esperanza,
tendrá que comparecer ante el supremo Dios Todo Poderoso, para rendir cuenta de
sus acciones mientras estuvo en su cuerpo en este mundo.
Desde Caín, el primer homicida de la Historia, hasta el último de los
pecadores que se negaron a recibir al Señor Jesús como su Salvador.
En mi DVD, sobre este tema, doy detalles profundos en ese momento en que los
libros son abiertos, y el que no se encontró escrito en El Libro de la Vida será
lanzado al lago de fuego.
Toda alma de todo ser viviente sabe que ese día llegará, y el alma tiene una
noción sobre este impactante día de la Historia; ese día comparecerán los
grandes líderes mundiales de todos los estratos sociales.
Veremos a Nabucodonosor, del Antiguo Testamento, entre otros; a Alejandro El
Grande, el gran conquistador de los griegos. Miraremos a todos los Césares y
Nerones. Miraremos a Adolfo Hitler, el más grande asesino del pueblo judío de
todos los tiempos; miraremos a todos los gobernantes de las naciones que no se
arrepintieron, grandes y pequeños delante del Gran Trono Blanco. Y por supuesto
que miraremos a Arafat, Saddam, Bin Laden y Kadafi.
Pero también miraremos a todos los grandes cantantes, artistas y actores,
comparecer ante El Trono Blanco, no para cantar, sino aterrados esperando su
final sentencia. De fijo, allí comparecerá Vicente Fernández, si es que no se
arrepiente antes de morir y recibe a Cristo, pero también miraremos a los
grandes líderes religiosos, desde todos los papas de El Vaticano hasta los
grandes falsos profetas de todos los tiempos.
El pasaje dice: Vi todos los muertos, grandes y pequeños. Es decir, de todos
los estratos sociales estarán frente al Gran Trono Blanco.

"Ante el trono celestial, en el gran Juicio
Final, Ap. 20:11-12". (7)
Como digo en el estudio en DVD, las razones de que se muestren una serie de
libros en ese juicio no significa que a lo mejor alguno podrá salir librado de
ese juicio, pues no debe olvidar que los que comparezcan a ese juicio se les
conoce como los “de la segunda resurrección”. Es decir, los que nunca fueron
salvos (
Apocalipsis 20:5).
Este gran juicio sucederá al final del milenio; al cabo de esos mil años,
satán y sus demonios son sueltos del pozo del abismo, y simultáneamente,
millones están resucitando, más los millones de humanos del milenio, que a pesar
de haber estado en el gobierno de Cristo, no lo recibirán.
Y satán los arrastrará juntamente con los muertos, para tratar de hacer la
última rebelión contra El Altísimo; esta será la última rebelión del espíritu de
Gog y Magog, demostrando con esto que el actual odio de las naciones árabes y
musulmanes contra el pueblo de Israel viene del mismo satán.
Una vez que satán logra reunir toda esa multitud contra El Altísimo, se da el
impresionante escenario del Juicio Final. Satán y sus demonios son lanzados
directamente al lago de fuego, pues ellos no necesitan oír el juicio, por cuanto
ya están enjuiciados; simplemente son lanzados al lago de fuego, donde ya
estarán el falso profeta y el anticristo.
Una vez que satán es lanzado al lago de fuego, se establece el impresionante
Trono Blanco, y el majestuoso Señor se sentará como Juez, para dar su final
sentencia.
Cuando dije que “miraremos”, es porque los santos que hayamos sido salvos por
la Sangre preciosa del Señor Jesús, y que permanecimos fieles a su Palabra hasta
su venida, estaremos en ese juicio final. Pero no como acusados, sino como
testigos del Señor Jesús.
Por favor vuelva a leer este pasaje de
Apocalipsis 20:11-15.
Mi amigo, cueste lo que te cueste trata de entregar tu corazón al Señor
Jesús; no mueras sin fe y sin esperanza, porque una vez muerto ya no hay
esperanza. El infierno será irremediable, y del infierno iras al Juicio Final.
Recuerda: No es de sabios rechazar al Señor Jesús.
Sobre todo, hazlo por amor a tu alma y tu familia, pues tus hijos seguirán el
camino que tú sigas; si tu alma se va al infierno, lo más seguro es que cuando
tus hijos lleguen a adultos también irán al mismo lugar tuyo. Pero si tú
terminas tus días en Cristo Jesús, muy seguro que tus hijos también serán
salvos.
A mis hermanos en Cristo, en especial a aquellos que lastimosamente, por no
estar leyendo la Biblia están siguiendo a falsos profetas, y haciendo prácticas
abominables, como las de los encuentros, más les vale que se aparten de esos
falsos ministros; de lo contrario, irán al mismo infierno, donde ellos se
encontrarán, y finalmente irán al juicio final como acusados.
Sigamos fieles al Señor Jesús y mantengámonos fieles a su Palabra.
San
Mateo 24:13 dice lo siguiente:
Mas el que persevere hasta el fin, este será
salvo.
Dios te bendiga.
Dr. Antonio
Bolainez.Shalom.
Ver más en
http://bolainez.org/temas/temas.php?tema_id=96